El verano de 1959 tuvo lugar la primera edición del Trofeo Naranja con dos invitados de excepción: el Santos de Pelé y el Inter de Milán, siendo el club brasileño el ganador del trofeo por la diferencia de goles. Volvió a ganar las Ligas 59-60 (doblete con la Copa) y la 60-61. En 1959 fue Balón de Bronce, tras Di Stéfano y Kopa. Se consagra Subcampeón de la Copa Conmebol, tras un violento partido de ida en su estadio, en la final disputada contra Atlético Mineiro de Brasil. Los dos empates de nuevo dejaban la clasificación para la fase final a expensas del último partido. España participó en el Mundial de 1986 tras quedar primera del Grupo 7 de la Clasificación UEFA, en donde se enfrentó a las selecciones escocesa, galesa e islandesa. España estuvo integrada en el Grupo 3 de la Clasificación UEFA y tuvo como rivales a las selecciones danesa, irlandesa, norirlandesa, lituana, letona y albana. España pasó el grupo de clasificación para disputar la Eurocopa de 1984 en Francia por delante de la selección neerlandesa, la selección irlandesa, la selección islandesa y la selección maltesa con bastantes problemas y de una manera inesperada. A su llegada a la concentración, Lucas ha expresado su ilusión por jugar con Francia.
Chaqueta Francia 2020 Con Capucha Rojo Azul Marino Model:EJ10241212 Representa a tu equipo con la Chaqueta Francia 2020 Con Capucha Rojo Azul Marino del Francia. Ese es, obtenida la clasificación, el gran anhelo del equipo que dirige Nabil Maaloul, a quien volvió a recurrir el año pasado la Federación tras la destitución de Henryk Kasperczak. Habían pasado varios años desde la fundación del club y al Athletic se le empezó a quedar pequeño el campo de Lamiaco. Juventud Estadio Club de Fútbol – Oviedo. Ante los límites del estadio Jean Bouin (aproximadamente 10.000 plazas), y siempre con el deseo de promocionar su club mientras espera un estadio más grande, Max Guazzini es cada vez más ambicioso. El 21 de julio de 2006, T-Mobile despedido Jan Ullrich del equipo a la espera de la investigación de dopaje. El equipo español estuvo encuadrado en el Grupo 1 y tuvo como rivales a la selección francesa, la selección checoslovaca, la selección albanesa y la selección islandesa.
Al haber empatado Alemania Federal e Inglaterra su primer partido, el equipo español estaba obligado a no perder el propio para continuar en el torneo. En el último partido, se tomó la revancha frente a Bélgica —tras la derrota en el anterior Mundial— al vencer por 2-1 con un tanto de Alberto Górriz y otro de Míchel. Antes de la disputa del último partido, encabezaban la clasificación los neerlandeses con una diferencia respecto a España de 11 goles. Finalmente España venció por 12-1 —un choque que transcurrido el primer tiempo iba 3-1— y logró una inverosímil clasificación. En el último partido de la clasificación que jugaría el equipo, este ya se encontraba sin ninguna opción de acceder al torneo. El 2 de junio se disputó el primer partido del grupo frente a Corea del Sur. En su primer partido España empató con Corea del Sur por 2-2 después de ir ganando por 2-0, a falta de 6 minutos para el final del encuentro. Justo en los cuartos de final.
Posteriormente, sería eliminada por la selección belga, en cuartos de final, luego de perder 5-4 en la tanda de penaltis tras empatar 1-1 en el tiempo reglamentario. Fue una derrota dolorosa, pero España conseguía firmar su mejor actuación de los últimos años y, lo más importante, volvía a ser una selección competitiva y que habría que tener en cuenta para próximos eventos. El tercero en discordia debe ser Lolo Reyes, pero el técnico podría optar por darle continuidad a Xavi Torres, toda vez que Matilla está descartado al no estar inscrito. Además, confeccionó el equipo en torno a Míchel, Butragueño y Sanchís, que debían ser la columna vertebral, ya que llegaban al Mundial en su plena madurez deportiva, con «La Quinta del Buitre». Esto significó el punto y final del peso de «La Quinta del Buitre» en la selección nacional. Después del torneo europeo, Luis Suárez fue designado nuevo seleccionador nacional. Tras Nelie Smith, coge el equipo una leyenda de los ‘Boks’ del 49, Cecil Moss, y marcha a lo imposible, a ganar una serie en Nueva Zelanda.